martes, 20 de septiembre de 2011

Más que un gran equipo, una gran familia, "un ejemplo a seguir"

"Somos una familia enorme". Quizás no haya mejor definición para la Selección Española de Baloncesto, y así lo recordaba José Manuel Calderón en la fiesta que citó ayer a cientos de aficionados en la madrileña Plaza de Callao, para celebrar el segundo Eurobasket logrado por este grupo, ahora en Lituania. Y quizás no haya mejor definición porque sólo hay que ver cómo se comportan dentro y fuera de la pista.





El primer ejemplo fue las muestras de apoyo que en todo momento tuvieron los jugadores y demás componentes de la Selección con la Familia Reyes tras el fallecimiento del padre de Felipe, Alfonso, mientras el equipo se preparaba para el torneo. Después siguió la elección de una canción que, versionado el final del estribillo, pasará a formar parte de la banda sonora del deporte español: Todos los días sale el sol, del grupo Bongo Botrako.


Y el último ejemplo se evidenció en la entrega del trofeo tras la final, cuando el capitán, Juan Carlos Navarro invitó a Felipe Reyes a que recogiera la copa de manos de S.A.R. el Príncipe Felipe y tuviera el honor de ser el primero en levantarla en el  Zalgiris Arena. "Quería dar las gracias a mis compañeros por el apoyo, por haberme dado la oportunidad de recoger la copa de campeón de Europa. Sobre todo a Juan Carlos, un gran capitán y una gran persona, porque él fue el culpable de que cogiese la copa y le pudiera brindar el triunfo a mi padre”, explicó Felipe Reyes, visiblemente emocionado en Callao y que no dudó más tarde en elevar el trofeo, esta vez al cielo de Madrid.

Para Marca el gesto fue todo un "detallazo", como explicaban en una portada donde dejaban claro que el equipo son "sencillamente... los mejores". También incidía en ese "gesto muy especial" Rafa Sauquillo, en el programa de Radio Marca Intermedio; mientras que para, Ángel Pérez, de Mundo Deportivo, lo que hizo Navarro demuestra que es "un crak fuera y dentro de la pista". Y precisamente para Raquel González, de AS, ese tipo de actitudes son las que les convierten en "más que una familia".

Poco después de concluir la final, el periodista de Onda Cero, Héctor Fernández (@Hectorfernandez) aplaudía  en Twitter a unos jugadores que "van de lección en lección". Y en este sentido, Fermín de La Calle, de AS, (@ASFerminDLCalle), comentó también en esta red social lo más positivo del equipo: "Lo bueno de la selección de Basket no es que gane, es cómo gana. Los detalles humanos, el talento deportivo". Sobre esta idea puso hincapié 
 en lo que el seleccionador, Sergio Scariolo, en la entrevista realizada en El partido de las 12 de la cadena Cope: "Si no tuviese valores humanos y deportivos muy profundos seguramente no podrían actuar como actúa"

Un gesto muy similar se pudo ver al término de la final de la última Liga de Campeones, entre el capitán del F.C. Barcelona, Carles Puyol y su compañero Éric Abidal, que se empezaba a recuperar de un tumor en hígado. Sea por la mayor dimensión del F.C. Barcelona en particular, y del fútbol en general, el hecho es que este segundo gesto tuvo mucha más repercusión mediática. De hecho, un periódico deportivo catalán como Sport, sólo recoge el gesto cuando lo recuerda Felipe Reyes en la fiesta de Callao, pero no en ningún otro artículo, de información u opinión, dedicado a la final del Eurobasket. Y es una pena porque, además del espectáculo que ofrece cuando juega esta Selección, también esas actitudes hacen que se acerquen a este deporte nuevas generaciones, como asegura un joven jugador del Club Baloncesto Alcobendas a un informativo de Antena 3"Son un ejemplo a seguir".

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